Los divertículos faringoesofágicos son adquiridos y se presentan en la edad adulta. Se trata de divertículos por pulsión relacionados con una hiperpresión intraluminal a nivel de la unión faringoesofágica, y su tratamiento suele requerir una diverticulectomía asociada a una miotomía cricofaringoesofágica. Este tratamiento solamente se aplica a los divertículos sintomáticos. Existe una alternativa quirúrgica representada por la diverticulopexia, que, si bien protege de las complicaciones, no es forzosamente una intervención más simple. Existe también una intervención endoscópica que consiste en poner en comunicación la luz de divertículo con la del esófago, efectuando al mismo tiempo una miotomía endoscópica gracias a una grapadora endoscópica.