En reumatología, el examen del líquido articular constituye una etapa clave del diagnóstico. El recuento celular debe efectuarse poco después de la punción y permite orientar el diagnóstico hacia un traumatismo inflamatorio cuando existan más de 2.000 células/mm³, o hacia una afección mecánica cuando existan menos de 1.000 células/mm³. El examen bacteriológico debe realizarse con carácter urgente, antes de instaurar antibioticoterapia. El descubrimiento del microorganismo causal mediante examen directo o mediante cultivo permite realizar el diagnóstico de certeza de artritis infecciosa y orienta el tratamiento antibiótico. La búsqueda de microcristales es un procedimiento rápido y poco costoso del diagnóstico de artritis microcristalina. El examen debe realizarse en el líquido fresco, entre un porta y un cubre, con microscopio óptico de luz ordinaria y después con un microscopio de luz polarizada. El equipamiento del microscopio con un compensador y una platina giratoria permite identificar de manera más fiable los uratos de sodio, que tienen birrefringencia negativa, y los pirofosfatos de calcio dihidratados, que tienen birrefringencia positiva. También se pueden identificar otros cristales (colesterol, oxalato, cristales cortisónicos, etc.). Hay que evitar posibles artefactos, en especial la presencia de cristales de anticoagulantes, lo que lleva a obtener el líquido con algunas gotas de heparinato de sodio o de citrato.