El tratamiento metabólico y dietético de un paciente litiásico es fundamental para prevenir la recidiva. Se basa ante todo en el análisis morfoconstitucional del cálculo por espectrofotometría infrarroja. En la actualidad, el estudio metabólico que incluye un análisis de sangre (para determinar creatininemia, calcemia, ácido úrico y glucemia en ayunas), la recogida de orina de 24 horas (diuresis, creatininuria, calciuria, ácido úrico, urea y natriuresis) y un análisis de la primera orina de la mañana (pH, densidad, tira de orina y cristaluria), según las recomendaciones del comité de litiasis de la Association Française d'Urologie, representa la base del tratamiento médico de un paciente litiásico. Una anomalía del estudio de entrada o un contexto determinado requieren una valoración nefrológica para realizar pruebas especializadas. En función de este estudio etiológico, se podrán ofrecer consejos dietéticos personalizados y un tratamiento farmacológico en caso necesario.